Sicilia es una isla que ofrece una amplia gama de experiencias culturales y naturales para los visitantes. Algunos de los lugares más destacados que ver en Sicilia son: el impresionante Monte Etna, que se puede explorar en un tour en jeep o un viaje en teleférico; las antiguas ruinas griegas de Agrigento y Siracusa, que son sitios declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO; la espectacular Catedral de Monreale, con sus impresionantes mosaicos dorados; la ciudad de Palermo, con su vibrante vida callejera y rica historia; y muchas cosas que te contamos en este artículo.
Además, no hay que perderse los deliciosos sabores de la gastronomía siciliana, como el cannoli, la pasta alla Norma, el cous-cous de pescado y el helado de pistacho.
- Monte Etna o Parco dell'Etna, un paisaje increíble que ver en Sicilia
- Taormina y el teatro griego con mejores vistas de Sicilia
- Necrópolis de Pantalica, el parque que ver en Sicilia con más de 5000 tumbas
- Siracusa
- Noto, un espectáculo de barroco que ver en Sicilia
- Cava d'Ispica
- Módica, la ciudad del chocoloate en Sicilia
- Ragusa Ibla, uno de los lugares con más encanto que visitar en Sicilia
- Villa Romana del Casale. Los mosaicos romanos que ver en Sicilia mejor conservados
- Morgantina
- Valle de los templos en Agrigento
- Scala dei Turchi, escondite de piratas
- Sciacca
- Selinunte, el parque arqueológico más impresionante que ver en Sicilia
- Cave di Cusa
- Favignana, las mejores que ver en Sicilia
- Levanzo
- Segesta
- Erice, la ciudad medieval que ver en Sicilia
- Reserva Natural RNO dello Zingaro
- Cefalú, la ciudad más pintoresca que ver en Sicilia
- Caccamo
- Monreale, los mosaicos bizantinos más famosos que ver en Sicilia
- Palermo
- Catania
- Islas Eolias, las más exóticas que ver en Sicilia
- Planifica tu viaje
Monte Etna o Parco dell’Etna, un paisaje increíble que ver en Sicilia
El Etna es el volcán más grande de Europa con una altitud de 3322 metros. Además se encuentra activo, por lo que no es raro que de vez en cuando se ponga en erupción y nos ofrezca verdaderos espectáculos de la naturaleza, como hemos ido viendo a menudo en estos últimos años. Un paseo por la zona, además de ser saludable, permite descubrir un paisaje aparentemente lunar y desértico, pero a su vez lleno de color y de vida. Sumergirse por sus laderas es sin duda una de las mejores cosas que hacer y ver en Sicilia.
Se puede tomar el Funivia dell’Etna, un funicular que sube a más altura pero a nosotros nos pareció algo caro (unos 50€ aunque, como siempre, os aconsejamos que comprobéis el precio actual en la web oficial ya que puede haber variado), así que decidimos aparcar el coche y dar un paseo por los cráteres inferiores que, la verdad, ya son una pasada.
Si os pica la curiosidad por coger el funicular y subir a más altura entonces os recomendamos que contratéis una excursión a la cima y cráter del volcán como ésta, en la que, aunque no se incluye, hay que tomar el Funivia. De hecho nosotros estuvimos a puntito de hacerla y finalmente no la hicimos porque la previsión del tiempo no era buena, así que no nos atrevimos a contratarlo. Pero ha quedado esa espinita clavada y pendiente para la próxima vez que visitemos Sicilia.
En invierno sabemos que la imagen del paisaje es muy diferente a lo que nosotros nos encontramos en verano y hasta se puede esquiar con un telón de fondo único: el mar y detrás, el aliento del volcán ¡tienen que ser emocionante!
Taormina y el teatro griego con mejores vistas de Sicilia
A unos 55 km al norte de Catania y a las faldas del Monte Tauro, se encuentra una de las ciudades más hermosas y visitadas de Sicilia: Taormina. Fue fundada en el siglo IV a.C. por griegos procedentes de Naxos, aunque más tarde caería en manos de romanos, normandos, árabes, bizantinos y catalanes.
A estos colonos griegos debemos el famoso Teatro Greco de Taormina, el segundo de mayor tamaño de la isla después del de Siracusa.
Este emblemático monumento sintetiza, quizás más que ningún otro, la historia, el arte, la belleza cultural y ambiental de la isla de Sicilia y aún se utiliza en la actualidad para conciertos y eventos culturales. Nos impresionó mucho su estratégica situación, con una panorámica que quita el aliento y levanta la admiración de todos los que lo visitamos.
Para visitar el teatro podéis comprar las entradas in situ en taquilla pero si vais con el tiempo justo y queréis comprarlas con antelación, también tenéis la opción de comprarlas online aquí.
Otra de las cosas que hacer en Taormina es pasear por sus características callejuelas, llenas de tiendas y locales de todo tipo. El paseo permite ir descubriendo continuamente rincones de gran interés como el Palacio Corvaja, que en 1911 fue sede del primer parlamento siciliano, la Iglesia de Santa Catalina, el Duomo, dedicado a San Nicolás y que se remonta al siglo XIII, y todo ello, en medio del glamour de la ciudad.
Algo que también tenemos que ver en esta ciudad de Sicilia son las vistas a la conocida Isola Bella desde la parte alta de la ciudad, una bonita isla diminuta y muy especial, unida a la costa por una estrecha franja de tierra que queda inaccesible al subir la marea.
Nuestro campamento base para visitar el Monte Etna y Taormina fue la ciudad de Catania, concretamente este alojamiento económico pero cómodo.
Necrópolis de Pantalica, el parque que ver en Sicilia con más de 5000 tumbas
Se trata de una sorprendente serie de cuevas funerarias excavadas en la roca y ubicadas en las paredes de las gargantas del valle de Anapo. Mucho antes de la llegada de los griegos a Sicilia, el valle estaba poblado por pueblos indígenas y su paso por el lugar, ha dejado un paisaje de belleza excepcional que hoy es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 2005.
En el valle de los ríos Anapo y Calcinara quedan grandes necrópolis con unas 5000 tumbas excavadas en la roca en las paredes de las gargantas y subdivididas en cinco grupos: la necrópolis de Filiporto, la necrópolis sur, la necrópolis del noroeste, la necrópolis de Cavetta y la necrópolis del norte, la más grande y densa.
Su visita consiste en una excursión de montaña por lo que hay que ir preparado para ello con agua, comida, ropa y calzado adecuados. Hacer la excursión circular entera son unos 12 km. A nosotros, como nos llovió y tuvimos que cobijarnos en una cueva durante un rato, no nos dio tiempo a hacerla entera. La ventaja es que se puede ver parte de la necrópolis a pocos metros del inicio de la ruta.
Por si no tenéis la opción de hacer esta excursión por libre o simplemente no os queréis complicar la vida, os dejamos enlace a este tour guiado desde Catania.
Siracusa
De entre todas las ciudades que ver en Sicilia, no se nos puede escapar Siracusa que fue en su día una de las más importantes del mundo occidental, aunque nos pueda parecer mentira por su reducido tamaño.
El primer asentamiento se fundó aproximadamente en la época de la fundación de Roma, en 734 a.C., por colonos corintios, en un islote cercano a la ciudad: Ortigia. Siglos más tarde, al aumentar su prosperidad, la ciudad se apoderó de tierra firme.
Para que os hagáis una idea de su notable expansión, en el siglo V ya poseía uno de los teatros más grandes y espectaculares, con capacidad para 15.000 espectadores y aun hoy conservado: el teatro griego de Siracusa. ¡Una auténtica pasada!
La UNESCO reconoció la singularidad artística y arquitectónica de Siracusa al declararla Patrimonio de la Humanidad en 2005. La antigua Area Monumentale della Neapolis, de la que podéis comprar la entrada aquí, y la fascinante isla de Ortigia, formada por callejones literalmente impregnados de monumentos históricos, grandes edificios, terrazas de colores y vistas impresionantes desde las que contemplar la puesta de sol, convierten a Siracusa en uno de los lugares que ver en Sicilia más nos gustó de nuestro viaje.
En Siracusa estuvimos alojados aquí, un pelín apartados del «meollo» para poder aparcar bien, pero a su vez muy cerca de todos los sitios a visitar.
Noto, un espectáculo de barroco que ver en Sicilia
Noto es otro de los lugares imprescindibles que visitar en Sicilia. Fue una honesta y anónima ciudad hasta 1693, cuando un espantoso terremoto arrasó con todo. Sus habitantes decidieron reconstruirla siguiendo nuevos y originales criterios urbanísticos dando lugar al nacimiento de una nueva Noto, con decenas de palacios, iglesias y conventos, que con el pasar de los siglos la han convertido en uno de los lugares barrocos más célebres del mundo.
Cava d’Ispica
Cava d’Ispica es un profundo desfiladero de unos 13 km de longitud que se formó por el paso de ríos en tiempos antiguos a través de la meseta de piedra caliza de las montañas Hyblaean, ubicadas al este de Módica. A lo largo de los siglos, la vida y la veneración a los fallecidos han persistido sin interrupción en las mesetas y gargantas de esta sorprendente zona natural, dejando fascinantes marcas desde la prehistoria hasta nuestros días.
En el parque, también conocido como Parco della Cava, se pueden encontrar asentamientos de diferentes épocas, cuevas, tumbas e iglesias en los acantilados, así como casas trogloditas excavadas en los acantilados como si fueran un panal. Algunas de ellas de varios pisos superpuestos, con restos de escaleras y huecos de acceso a los niveles superiores. Se pueden encontrar catacumbas e hipogeos (tumbas subterráneas), como el sepulcro de Larderia (siglos IV-V d. C.), que está dividido en tres naves y contiene más de 400 sepulturas, o el hipogeo del Camposanto.
Módica, la ciudad del chocoloate en Sicilia
Seguro que habréis oído hablar alguna vez de un lugar llamado Módica ¿será tal vez por su chocolate? o ¿por su arquitectura barroca? A nosotros la verdad es que nos sorprendió y nos enamoró este lugar y también, por supuesto, ¡su chocolate! pero hay muchas más cosas que ver y hacer en esta ciudad de Sicilia: desde visitar las ruinas del antiguo castillo, los palacios nobles históricos, hasta alucinarse con iglesias que representan uno de los mayores testimonios del periodo barroco italiano, como la Iglesia de San Giorgio, del siglo XII y reconstruida cinco siglos después siguiendo los nuevos cánones estéticos de la época, y la Chiesa del Carmine.
Tuvimos la gran fortuna de encontrar este alojamiento a puertas de la iglesia de San Giorgio que además nos pareció un chollo su precio.
Hablemos del chocolate de Módica… Debéis saber que en esta ciudad siciliana es muy famoso un particular y delicioso chocolate que se elabora con una receta antigua y única que se remonta al siglo XVI, lo que le da un sabor único y muy diferente al de los chocolates belgas y suizos a los que estamos más acostumbrados. Nos gustó mucho aunque al principio se nos hizo extraña su textura harinosa y apreciar los granos del azúcar al masticar. Encontraréis varias fábricas y tiendas de chocolate artesanal por toda la ciudad. Si sois tan adictos al chocolate como nosotros, os animamos a que lo probéis.
Ragusa Ibla, uno de los lugares con más encanto que visitar en Sicilia
Ragusa es una ciudad antigua de Sicilia fundada por los sículos sobre una colina entre los siglos IX y VII a.C. A lo largo de los años, diferentes civilizaciones, como los griegos, romanos, árabes y normandos, han habitado la ciudad. En 1693, un fuerte terremoto destruyó Ragusa Ibla, y los habitantes decidieron reconstruir la ciudad en una zona cercana lo que llevó a la reconstrucción de la ciudad en dos secciones distintas: una nueva con calles amplias y otra con calles estrechas. Estas dos secciones finalmente se unieron en 1926.
La iglesia de San Giorgio, construida por Gagliardi y conocida como Duomo, es una de las más reconocidas de Ragusa Ibla. Tiene una apariencia dinámica y teatral con las características típicas del barroco siciliano.
Otros de los lugares más importantes de la ciudad son la Catedral de San Giovanni Battista y la Iglesia de Santa Maria delle Scale. También hay algunos edificios antiguos, como el Palazzo del Circolo di Conversazione y el Palazzo di Donnafugata, que son muy bonitos. Sin lugar a dudas, Ragusa es uno de los lugares que más nos gustó para ver en Sicilia.
Villa Romana del Casale. Los mosaicos romanos que ver en Sicilia mejor conservados
Otro de los rincones imprescindibles que ver en Sicilia es la conocida Villa romana del Casale, la enorme y lujosa residencia rural romana, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1997 y situada a poca distancia de Piazza Armerina. Se trata del testimonio más valioso de la presencia romana en Sicilia. Se cree que la villa perteneció a un rico aristócrata pagano durante la época de Constantino en el siglo IV. En la Edad Media fue enterrada por un aluvión y no fue desenterrada hasta mediados del siglo XX.
Lo más destacable del lugar son los fascinantes mosaicos que hay en todas las estancias de la villa, cubriendo una extensión de 3500 m², con representaciones de caza, escenas mitológicas y las conocidas chicas en «bikini» practicando deporte, entre muchas otras.
La verdad es que los mosaicos nos parecieron una maravilla. Solo el pensar el trabajo que costaría en su día construirlos y que después de tantos años se encuentren tan bien conservados, es una locura.
Este lugar es una visita obligada para incluir en tu lista de cosas que ver en Sicilia.
Podéis visitar esta villa romana por libre o bien, si preferís que un guía os explique todos los detalles del lugar, podéis reservar con antelación una visita guiada como esta. Si no disponéis de coche para llegar a Piazza Armerina por vuestra cuenta y os encontráis en Palermo o Catania, o simplemente llegáis en crucero a una de estas dos ciudades, también tenéis estas opciones que os permitirá visitar el Valle de los Templos de Agrigento, también.
- Valle de los Templos de Agrigento y Piazza Armerina desde Palermo
- Valle de los Templos de Agrigento y Piazza Armerina desde Catania
Nosotros nos alojamos aquí en Piazza Armerina.
Morgantina
A menos de 10 km de Piazza Armerina, en pleno corazón de Sicilia, se encuentra el yacimiento arqueológico de Morgantina. A nosotros, que nos apasiona la historia, pasear por estos restos arqueológicos completamente solos nos puso los pelos de punta . Lo recordamos como un muy grato recuerdo.
No queremos extendernos mucho porque en este blog vamos a escribir varios artículos hablando de Morgantina. Uno sobre el museo de esta ciudad (que también visitamos), otro sobre los restos arqueológicos de la inmensa ciudad y otro sobre la Dea di Morgantina. Es una estatua que fue expoliada, vendida en el extranjero y recuperada por pura casualidad hace algunos años.
Morgantina era una ciudad completamente griega, fundada (según dice la leyenda) mil años antes de que naciera Jesucristo y abandonada a finales del periodo de la República Romana. Tiene absolutamente todo lo que se puede esperar en una ciudad griega: un teatro, una termas, un circo, un foro, mosaicos, viviendas y un trazado asombrosamente cuadriculado, como el que pudiera tener Barcelona o Nueva York. Eso sí, ese trazado cuadriculado solo se puede ver desde el aire, porque hoy en día han desaparecido por completo los edificios y lo que se ve es una inmensa llanura, en la cima de una colina, con vistas a los campos sicilianos en la lejanía.
Morgantina durante un tiempo fue gobernada por españoles, o para ser más exactos, por mercenarios hispanos (nacidos en lo que hoy es España en el siglo II a. c.). Incluso llegaron a acuñar monedas con el membrete «HISPANORVM» (que significa «de Hispania»). 18 siglos después Morgantina volvió a ser gobernada por españoles, en este caso de la Corona de Aragón, pero para entonces solo quedaban ruinas. Ahora los españoles que la visitamos solo hacemos fotos.
Valle de los templos en Agrigento
Otro de los lugares que tienes que ver en Sicilia es el conocido Valle del Tempi o Valle de los templos. Visitar este lugar significa sumergirse totalmente en la historia de la Sicilia griega. Se trata de un yacimiento arqueológico declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en 1997 y que comprende una extraordinaria sucesión de templos, que datan del siglo VI al IV a.C.
Uno de ellos, el templo de la Concordia, erigido en el año 440 a.C., nos permite comprender la importancia histórica de este lugar por ser considerado una de las obras más importantes de la arquitectura griega gracias a su solemne elegancia y simetría en las proporciones. Su estado de conservación es excepcional por las transformaciones que fue sufriendo hasta mediados del siglo XVIII, utilizado como iglesia cristiana.
Por otro lado, otro de los templos a destacar que componía este complejo fue el Templo de Zeus, el tercero más importante del mundo griego y del que ya solo podemos encontrar sus piedras amontonadas por la zona. Impresiona el tamaño de los telamones, las gigantescas estatuas de 7 metros de altura que soportaban la estructura junto a las semicolumnas del mismo templo.
Puedes comprar las entradas en taquilla o bien comprarlas online aquí. Si eres de los que prefiere que un experto le explique las cosas más importantes del lugar, también existe la opción de contratar un tour con guía privado en español como este, para que os haga el recorrido por las partes más interesantes y a su vez os cuente toda la historia y anécdotas del lugar.
Scala dei Turchi, escondite de piratas
La Scala dei Turchi es un impresionante acantilado de piedra caliza blanca ubicado en la costa sur de Sicilia, en la provincia de Agrigento. La forma del acantilado se asemeja a una escalera natural que desciende hacia el mar, y se encuentra cerca de la ciudad de Realmonte.
El nombre «Scala dei Turchi» se traduce como «La escalera de los turcos», y se cree que proviene de la época en que los piratas turcos invadían la costa siciliana y utilizaban el acantilado como refugio.
La piedra caliza blanca de la Scala dei Turchi es un material fácilmente erosionable, y con el tiempo ha sido moldeada por la acción del viento y el mar, creando formas caprichosas y espectaculares.
Nos pasa siempre que cada lugar que visitamos tiene una canción que nos lo recuerda. Sicilia también. Y es que, precisamente en la playa que hay que atravesar para llegar a la Scala dei Turchi es donde escuchamos por primera vez esa canción: la canción para Sicilia, la de Ana Mena y Fred de Palma «Se iluminaba«.
Estuvo sonando todos los días en la radio del coche en nuestra ruta por la isla. Al final terminamos subiendo el volumen, bailoteándola y cantándola en el coche como dos locos cada vez que sonaba aunque ahora, da algo de vergüenza reconocerlo. Fue un año antes de que se hiciera tan conocida en España. Y ahora, cada vez que escuchamos esa canción nuestra mente, inevitablemente, viaja de nuevo a Sicilia. Somos un poco frikis… ¡si!
Sciacca
Sciacca es una ciudad muy pintoresca, conocida por sus playas, su puerto pesquero y sus aguas termales. El casco antiguo de Sciacca es un verdadero laberinto de callejuelas estrechas que conducen a plazas y monumentos históricos.
Una de las atracciones más populares de Sciacca son sus aguas termales, que se dice que tienen propiedades curativas para diversas dolencias. Hay varios balnearios en la ciudad donde uno puede disfrutar de baños termales y tratamientos de spa.
Nosotros hicimos una breve parada en Sciacca en nuestra ruta en coche por Sicilia y pudimos visitar el puerto pesquero. De repente se nos puso a llover a mares y tuvimos que irnos sin poder visitar algunos otros rincones que queríamos. No nos quedará otra que volver. :D
Si podéis hacer coincidir vuestra visita a la ciudad en el mes de febrero, podréis de disfrutar de una de las cosas más únicas que hacer en Sicilia: vivir su famoso Carnaval, uno de los más antiguos de Italia, que se celebra en febrero y cuenta con una colorida procesión de carrozas y disfraces.
Selinunte, el parque arqueológico más impresionante que ver en Sicilia
Selinunte es ese lugar típico que aunque se nombre en las guías de viaje de Sicilia, pasa bastante desapercibido, algo que no terminamos de entender mucho. Pues para nosotros es uno de los sitios arqueológicos que ver en Sicilia que más recomendamos. Es conocido por sus ruinas de la antigua ciudad griega que fue fundada en el siglo VII a.C. y fue una de las ciudades más importantes de la Magna Grecia. La ciudad se extendía sobre una gran área y tenía varios templos, murallas y otros edificios.
Aunque todavía queda mucho por desenterrar, el sitio arqueológico de Selinunte es uno de los más grandes y espectaculares de toda la región mediterránea. Se encuentra en una posición privilegiada en una colina que domina el mar, y es famoso por sus templos dóricos bien conservados, incluyendo el Templo E, uno de los más grandes de la Antigua Grecia.
Desafortunadamente, la ciudad fue destruida por los cartagineses en el siglo V a.C. después de una larga y tempestuosa historia de alianzas y conflictos con otras ciudades griegas y con los púnicos.
En realidad, la ciudad enemiga de Selinunte era Segesta, que envidiaba y estaba muy preocupada por su auge del comercio. Fue la batalla con Segesta lo que provocó el fin de Selinunte, gracias la ayuda de los cartagineses, quienes, olvidando la antigua alianza con Selinunte, asediaron y destruyeron por completo la ciudad, perpetrando una horrible masacre.
A pesar de la destrucción, el sitio sigue siendo un testimonio impresionante de la antigua civilización griega en Sicilia y aunque debería ser uno de los destinos turísticos más populares de Sicilia, no nos pareció que hubiera tantos visitantes como merecía.
A pesar de haber leído algo sobre el lugar antes de ir, como solemos hacer siempre, realmente no nos esperábamos lo que vimos. Nos impresionó de verdad, no solo la extensión del lugar, sino tamaño colosal de sus templos.
Podéis comprar las entradas online para Selinunte en este enlace que os dejamos.
Cave di Cusa
Tuvimos la oportunidad de visitar las canteras de donde extraían las rocas para la construcción de los templos y nos encantó la experiencia. No dejábamos de preguntarnos e imaginarnos qué tuvo que pasar para que se quedaran algunos de los enormes bloques ya tallados a su medida y ya con su forma, allí en medio. Daba la impresión como si hubieran tenido que salir corriendo por algún motivo, y tras todos estos siglos todo sigue todo tal cual donde lo dejaron.
Algo que nunca hemos terminado de entender es por qué lo vimos solos, ya que para nosotros esta visita nos pareció una de las experiencias imprescindibles que hay que hacer en Sicilia.
Cuando visitamos Selinunte y Cave di Cusa nos alojamos en la zona de Mazara del Vallo, aquí, en casa de un pescador jubilado que nos recibió y nos trató como a su familia.
Favignana, las mejores que ver en Sicilia
Favignana y Levanzo son dos islas de origen volcánico que forman parte del archipiélago de las islas Egadi, ubicado en la costa occidental de Sicilia.
La isla más grande y poblada del archipiélago es Favignana que es famosa por sus hermosas playas, calas y cuevas, así como por su mar cristalino, ideal para practicar deportes acuáticos como el buceo y el snorkel. Además, en la isla se pueden visitar antiguas canteras de tuffo, una roca volcánica utilizada en la construcción, así como las salinas que han sido explotadas desde la época fenicia.
Si tenéis ocasión y tiempo en vuestro viaje a Sicilia, merece la pena una escapada para alucinar con la belleza del mar, de sus playas como la rocosa Cala Rossa, la pequeña Cala Azurra, o la Bue Marino.
También por la Tonnara Florio, construida en 1859 y que se ha convertido en símbolo de la isla. La Tonnara fue en su día el pilar económico de la isla y lugar donde en su día tuvo lugar la «matanza» del atún.
En Favignana nosotros nos alojamos en este hotel.
Levanzo
Por otro lado, Levanzo es la isla más pequeña y menos poblada de las tres islas Egadas. Es conocida por sus hermosos paisajes naturales y por la presencia de restos arqueológicos prehistóricos, como cuevas donde se han encontrado pinturas rupestres que datan de la época paleolítica y neolítica.
Ambas islas ofrecen una experiencia única de turismo de naturaleza y cultura, así como la oportunidad de disfrutar de una deliciosa gastronomía local, basada en pescados y mariscos frescos y otros productos típicos de la región. Además, desde el puerto de Trapani se pueden tomar ferries para llegar a ambas islas y disfrutar de una inolvidable excursión en el archipiélago de las islas Egadas.
Si no disponéis de mucho tiempo para visitar estas islas tranquilamente y hacer alguna noche, os recomendamos este crucero de día entero que sale del puerto de Trapani y que incluye prácticamente todo lo que vimos nosotros.
Segesta
Segesta fue la ciudad más importante del territorio de los élimos y estuvo en continuo conflicto con Selinunte, quien se convirtió en su eterna rival.
Lo más fascinante de Segesta es su templo dórico, uno de los más valiosos y mejor conservados de la antigüedad, y su teatro enclavado en suaves pendientes y con vistas a un espléndido paisaje que se extiende hasta el mar, donde se realizan puntualmente representaciones teatrales.
La función de este templo ha sido muy debatida, ya que no hay rastro de la cella normalmente dedicada a los dioses: esto sugiere que podría haber sido un pseudo-templo en formas griegas destinado a realzar la nobleza de un lugar de culto más primitivo.
La entrada a Segesta la podéis comprar online aquí. Si estáis en Palermo y no tenéis coche o habéis llegado en crucero o simplemente no os queréis complicar la vida, os recomendamos que contratéis una excursión a Segesta como esta que incluye también Erice.
Erice, la ciudad medieval que ver en Sicilia
Erice es una pequeña localidad de Sicilia, ubicada en la cima de una colina en la provincia de Trapani. Fue fundada por lo élimos en el siglo V a.C. Con el paso de los años y de sus diferentes pobladores cartagineses, normandos, árabes, bizantinos y españoles, fue adoptando una estructura urbanística típicamente medieval.
Se encuentra a unos 750 metros sobre el nivel del mar, por lo que os podéis imaginar sus vistas: encontraréis impresionantes panorámicas de las islas Egadas, la ciudad de Trapani y el monte Cofano.
Erice es famosa por sus calles estrechas y empedradas, sus casas de piedra, sus iglesias y sus fortificaciones medievales. Lo más destacado es el Castillo de Venus, una fortificación normanda del siglo XII. También se pueden visitar varias iglesias, como la Chiesa Madre y la Chiesa di San Martino, que contienen hermosos frescos y esculturas.
La ciudad es conocida por su gastronomía, especialmente por los dulces tradicionales como los pasteles de almendras ¡riquísmos! y los dulces de mosto. No podéis perderos la pastelería tradicional Maria Grammatico, donde podréis probar estos dulces artesanales tan ricos que os comentamos.
Este lugar es sin duda uno de los destinos imprescindibles que ver en Sicilia y que no debes perderte por nada del mundo.
Reserva Natural RNO dello Zingaro
RNO Dello Zingaro es una reserva natural ubicada en la costa noroeste de la isla. «RNO» significa «Riserva Naturale Orientata», que se traduce como «Reserva Natural Orientada». Esta designación se otorga a reservas naturales que tienen una importancia ecológica y paisajística significativa, y que también son de interés para la educación y el turismo.
Para nosotros, que somos amantes de la naturaleza, este lugar es un espectáculo. El parque natural cuenta con varias rutas de senderismo que serpentean la costa a través de sus impresionantes acantilados de mármol y su agua cristalina de color turquesa. Es, sin duda, una de las cosas que hacer en Sicilia que más nos gustó.
Uno de los recorridos, el que nosotros hicimos, permite llegar a una pequeña playa de guijarros y aguas cristalinas llamada Cala del Varo, que es una de las más bonitas a la que os podéis acercar para daros un chapuzón refrescante durante la excursión. Sienta de maravilla si hacéis la excursión en verano con calor sofocante. También hay varias cuevas marinas en la reserva que son populares entre los buceadores.
La visita a esta reserva natural es una ruta senderista sencilla pero requiere de calzado adecuado, protección solar, agua para hidratarse. No encontraréis restaurantes ni bares en este lugar por lo que, si la idea es pasar el día es mejor llevarse un bocadillo o algo de comer.
Estábamos alojados en Castellammare del Golfo en este alojamiento sin grandes lujos pero donde nos encontramos muy a gusto y donde nos preparaban un desayuno casero espectacular.
Cefalú, la ciudad más pintoresca que ver en Sicilia
Cefalú es una pequeña ciudad ubicada en la costa norte de Sicilia. Es conocida por su impresionante catedral normanda del siglo XII, que es uno de los principales atractivos turísticos de la ciudad.
Además de su catedral, Cefalú tiene otros lugares de interés turístico, como el Castillo de Cefalú, conocido como Roca de Cefalú, que data del siglo XIII y ofrece vistas impresionantes de la ciudad y el mar, por lo que merece mucho la pena el esfuerzo de la subida. Es importante llevar calzado cómodo, pues aunque no es una subida muy complicada, es prácticamente una mini ruta senderista.
También hay numerosos restaurantes y bares que ofrecen una variedad de platos sicilianos, desde mariscos frescos hasta pasta y pizza.
Cefalú tiene una rica historia que se remonta a la época de los griegos antiguos, y ha sido habitada por una variedad de culturas a lo largo de los siglos, incluidos romanos, bizantinos, árabes y normandos. Cada una de estas culturas ha dejado su huella en la ciudad, que se refleja en su arquitectura, su comida y su cultura.
Además de su belleza arquitectónica, Cefalú ofrece playas de arena dorada, aguas cristalinas y un ambiente veraniego relajado y agradable.
Cerca de Cefalú nos alojamos en un lugar muy tranquilo en medio de ninguna parte en este apartamento con piscina y nos recibieron con una bandeja de fruta increíble.
Caccamo
Otro de los lugares que ver en Sicilia es Caccamo, una pequeña ciudad ubicada a las faldas de las montañas de Madonie, a unos 60 km al sureste de la ciudad de Palermo.
La ciudad cuenta con un impresionante castillo normando que se encuentra en una colina con vistas a la ciudad. El castillo de Caccamo, construido en el siglo XII, es uno de los castillos mejor conservados de la región. Se pueden visitar las murallas del castillo, las torres y las habitaciones, y disfrutar de las impresionantes vistas panorámicas de la ciudad y los alrededores.
Además del castillo, Caccamo tiene otros lugares de interés turístico, como la iglesia de San Giovanni Battista, una iglesia barroca del siglo XVIII con una fachada impresionante, y la iglesia de Santa Maria degli Angeli, que alberga una interesante colección de arte sacro.
En nuestra visita a Caccamo nos topamos con una especie de museo u oficina de turismo a los pies del castillo. Lo llevaba un señor entrañable y ya con cierta edad como para estar jubilado, llamado Giovanni Aglialoro. Nos emocionaron sus esfuerzos, su energía y su empeño para dar a conocer su amada tierra.
Caccamo también es conocida por su producción de aceitunas y aceite de oliva, su deliciosa gastronomía local y por sus dulces tradicionales, como los cannoli sicilianos y los biscotti.
Monreale, los mosaicos bizantinos más famosos que ver en Sicilia
Monreale es una pequeña ciudad situada a pocos kilómetros al oeste de la ciudad de Palermo que ofrece una combinación única de historia, arquitectura, arte y paisajes impresionantes. Es conocida principalmente por su espectacular catedral normanda, que es considerada una de las joyas arquitectónicas de la isla.
La catedral de Monreale, construida en el siglo XII por el rey normando Guillermo II, es famosa por sus mosaicos bizantinos que cubren prácticamente toda su superficie. Los mosaicos cuentan historias bíblicas y retratan escenas de la vida de Cristo. Son considerados algunos de los mejores ejemplos de arte bizantino en el mundo.
Además de la catedral, Monreale también es conocida por su impresionante vista panorámica de la bahía de Palermo. El casco antiguo de la ciudad, con sus estrechas calles empedradas y sus antiguas casas de piedra, es un lugar encantador para pasear y explorar.
Otras atracciones en Monreale incluyen el claustro del monasterio benedictino adyacente a la catedral, con sus hermosos arcos y columnas decoradas con motivos geométricos y florales, y el Museo Diocesano, que alberga una colección de arte religioso de la región.
Si llegáis a Palermo en crucero y Monreale es uno de los lugares que os apetece ver en Sicilia, podéis contratar este tour de 6 horas que incluye también la visita a Cefalú.
Palermo
Palermo es la capital de la isla y es una de las ciudades más grandes y fascinantes de Italia, ¡y muy caótica también!
Fue fundada por los fenicios en el siglo VIII a.C. Desde entonces ha sido gobernada por varios imperios y civilizaciones, incluyendo romanos, bizantinos, árabes, normandos y españoles, lo cual ha dejado huella en su patrimonio arquitectónico.
El centro histórico de Palermo es un laberinto de calles estrechas y plazas llenas de vida, donde se pueden encontrar algunos de los monumentos más impresionantes de la ciudad, como la Catedral de Palermo, el Palacio de los Normandos y la iglesia de San Giovanni degli Eremiti, todos ellos declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Además de su patrimonio arquitectónico, Palermo es famosa por su comida, considerada una de las más deliciosas y variadas de Italia. Y por sus mercados callejeros. No os perdáis la experiencia de pasear por alguno de los más conocidos: Mercato del Capo, el Mercato Ballarò y el Mercato Vucciria. ¡Alucinaréis!
Catania
Catania es la segunda mayor ciudad de Sicilia y es tan intensamente italiana que no estábamos preparados para el impacto. Forma parte de un núcleo urbano de más de 1.200.000 habitantes, con 2.700 años de historia y un patrimonio cultural y artístico imposibles de abarcar en un solo viaje.
No te dejes desilusionar por la primera impresión. La falta de limpieza y el caos echan para atrás, pero cuando te dejas llevar sin rumbo encuentras tesoros que hacen que se convierta en una de las imprescindibles que ver en Sicilia.
Pondremos solo unos pocos ejemplos: un teatro romano en medio de destartalados edificios, un río subterráneo debajo de un restaurante cualquiera o una iglesia en una calle secundaria que sería por sí sola monumento nacional en Estados Unidos. Catania es mucha Catania.
Se encuentra muy cerca del Monte Etna, el volcán activo más grande de Europa. Esto la convierte en un «campamento base» perfecto para visitar el volcán y sus alrededores.
Islas Eolias, las más exóticas que ver en Sicilia
Las Islas Eolias, también conocidas como las Islas Lipari, son un archipiélago volcánico en el mar Tirreno, frente a la costa norte de Sicilia. Las siete islas principales son Lipari, Vulcano, Salina, Stromboli, Filicudi, Alicudi y Panarea, y también hay varios islotes más pequeños.
Cada isla tiene su propio encanto y características únicas, pero todas tienen en común las aguas cristalinas de sus playas e impresionantes paisajes naturales. Son una meca para los amantes de la actividad al aire libre, como senderismo, buceo y kayak.
Lipari es la isla más grande y cuenta con un animado puerto deportivo, tiendas y restaurantes. Vulcano es famosa por sus baños de barro y aguas termales naturales, mientras que Salina es conocida por sus viñedos y producción de vino.
Stromboli es, seguramente, la isla que más os sonará. Es la única habitada que cuenta con un volcán activo cuya actividad ha sido noticia en los últimos años.
Aunque las islas son un destino turístico popular, todavía mantienen un ambiente tranquilo y relajado, con un ritmo lento y una atmósfera auténticamente siciliana. ¡Una escapada perfecta a un paraíso tropical!
Las islas Eolias nos las hemos apuntado como destino que ver en Sicilia en nuestro próximo viaje a la isla.